Y regreso al recinto
de altanera maldad,
atraída como un
mosquito a la luz.
No tengo voluntad y
pese al esfuerzo
el cuerpo no quiere
responder.
Hipnotizada por la
tenue luz de la luna,
o quizá guiada por la
melancolía de los recuerdos,
idea tan patética que
luché por olvidar
vagué sin destino
todo por olvidar tu
triste memoria
mas no hago otra cosa
que volver al lugar,
a nuestro lugar...
Ayer con la fuerza de
un predador,
hoy con la fortaleza
de una víctima más.
La confianza y la
sensación de poder se han marchado,
quizá se deba a la falta
de energía
o al frío espectral
que recorre mi anatomía;
finalmente tendré que
dar la batalla por perdida
poseyendo tan sólo la
esperanza
de que podré ganar la
guerra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario